La imagen fue impactante y se viralizó rápidamente en redes sociales. Inmediatamente después del segundo gol de São Paulo pudo verse a Miguel Navarro, lateral venezolano de Talleres, romper desconsoladamente en llanto en pleno Morumbí.
Navarro quedó visiblemente afligido mientras sus compañeros se cruzaban con futbolistas rivales y el juez del partido, Piero Maza, intentaba acomodar. Una vez finalizado el partido Federico Girotti, delantero de Talleres, declaró que su compañero quedó afectado luego que Damián Bobadilla le dijeran “Venezolano muerto de hambre”.
El descargo de Miguel Navarro
Navarro habló con la prensa en zona de vestuarios y confirmó los dichos por parte de Damián Bobadilla, mediocampista de São Paulo y la Selección de Paraguay.
El lateral venezolano de 26 años realizó una denuncia ante la policía militar en el Estadio Morumbí, y luego lanzó una publicación en redes sociales asegurando “iré hasta las últimas consecuencias frente al acto de xenofobia que viví hoy en Brasil”.
Damián Bobadilla pidió disculpas y un compañero de selección cruzó a Navarro
El volante paraguayo de 23 años se pronunció públicamente en su cuenta de Instagram, y aunque aclaró que fue “ofendido primeramente” reconoció su error y pidió disculpas: “No tuve la intención de discriminar a nadie y en la calentura reaccioné mal y pido disculpas”.
Pero enseguida apareció una publicación de Julio Enciso, mediocampista de Brighton y uno de los futbolistas paraguayos más importantes del momento, mostrando su apoyo a Bobadilla, compañero de selección.
Enciso publicó su mensaje junto a una foto del propio Miguel Navarro gritándole en un partido de Eliminatorias Sudamericanas entre Paraguay y Venezuela, escribiendo que “Yo me guardé todos los malos tratos de este señor”.
Repudio generalizado y posible sanción
La situación generó repudio generalizado, y comunicados oficiales por parte de Talleres de Córdoba y la Federación Venezolana de Fútbol.
CONMEBOL, de constante cruzada en contra de actos racistas, todavía no se pronunció al respecto. De todas formas se especula con una posible sanción a Bobadilla, cuyo reglamento estipula al menos cinco fechas de suspensión por situaciones similares.
NZ