El socialista primer ministro canadiense, Mark Carney, anunció el viernes que Canadá suspenderá la mayoría de sus aranceles retaliativos contra Estados Unidos, después de que la administración del expresidente Donald Trump reafirmara su compromiso con el acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA).
Esta decisión marca un cambio significativo en la postura canadiense tras varios meses de tensiones comerciales, y ha sido tomada como una señal de buena voluntad hacia Washington.
A pesar del retiro de la mayoría de los aranceles, Canadá mantendrá un derecho del 25% sobre el acero, el aluminio y los vehículos provenientes de Estados Unidos, ya que estos productos no están cubiertos directamente por el USMCA.
En marzo, Canadá había impuesto estos aranceles como represalia luego de que la administración Trump aplicara un arancel similar del 25% sobre el acero y el aluminio canadiense.
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Según algunos medios, esta decisión del gobierno canadiense se interpreta como una especie de »rama de olivo» hacia Trump, buscando calmar las tensiones bilaterales y abrir camino a futuras negociaciones.
Carney subrayó que la política de aranceles retaliativos de Canadá siempre ha tenido como objetivo proteger a los trabajadores y empresas canadienses, además de incentivar una solución negociada con Estados Unidos. También señaló que otros países adoptaron estrategias similares en disputas anteriores.
En su intervención, Carney destacó que recientemente Estados Unidos reafirmó su compromiso con el USMCA, garantizando que las exportaciones canadienses que cumplan con los términos del tratado no estarán sujetas a nuevos aranceles.
Esta decisión, según el primer ministro, ha reducido la tasa arancelaria efectiva sobre productos canadienses al 5,6%, una cifra significativamente inferior al promedio mundial de 16%, y la más baja entre los socios comerciales de Estados Unidos. Además, más del 85% del comercio entre ambos países se mantiene libre de aranceles bajo los términos actuales.
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Cabe recordar que a finales de julio, Trump firmó una orden para imponer un arancel del 35% sobre productos canadienses. Sin embargo, la Casa Blanca aclaró después que la mayoría de estos productos están exentos bajo el USMCA, lo que en la práctica deja la tarifa promedio en 5,6%.
Un funcionario de la Casa Blanca comentó que la decisión de Canadá de reducir sus aranceles era »muy esperada», y expresó optimismo sobre futuras conversaciones bilaterales en torno a preocupaciones comerciales y de seguridad nacional.
Otro funcionario, citado bajo anonimato, indicó que el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, había advertido recientemente a Canadá sobre las consecuencias de mantener los aranceles retaliativos, instando a su eliminación para facilitar el diálogo.
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La decisión canadiense de retroceder se produjo tras una conversación telefónica entre Carney y Trump, la cual el primer ministro calificó como »productiva y de amplio alcance».
El USMCA podría ser revisado formalmente más adelante este año, lo que podría abrir nuevas oportunidades para ajustar o ampliar los términos del acuerdo. Carney también mencionó que Canadá buscará avanzar hacia una nueva forma de asociación en comercio y seguridad con Estados Unidos.