Gabriel De Raedemaeker, exvicepresidente de la Confederación Rural Argentina (CRA), expresó su inquietud por cómo los gobiernos siguen utilizando al campo como “una fuente fácil de recursos fiscales”. El empresario y dirigente sostuvo que “el gobierno sigue siendo siempre socio en las ganancias, pero lo que es peor, aún en situaciones de pérdida absoluta (para el campo) el gobierno es el principal extractor del sector”.
En ese sentido, añadió que “es tan grande la tentación que tienen los gobiernos de echarle mano al campo, que independientemente de los discursos, el sector siempre es visto como la caja de recursos fiscales más rápida para acceder”, destacando que, a pesar de las promesas de cambio, la situación sigue siendo la misma.
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En declaraciones a ‘Los Agusti’, que se emite por Mitre Córdoba, De Raedemaeker hizo hincapié en la injusticia de las retenciones, que afectan al productor incluso en momentos de pérdidas. Esta situación limita la rentabilidad y el crecimiento del sector agropecuario, obligando a los productores a adoptar tecnologías defensivas que les permitan mantenerse a flote, en lugar de enfocarse en aumentar su productividad, destacó De Raedemaeker.
A nivel provincial, el dirigente destacó la buena relación entre el sector agropecuario y el gobierno de Córdoba, que se ha mantenido durante los últimos años. Según De Raedemaeker, esta relación ha sido clave para abordar de manera conjunta diversos problemas del sector, demostrando que el diálogo constante y el trabajo conjunto pueden generar soluciones. “En Córdoba se viene manteniendo una línea de relación entre el sector agropecuario y el gobierno que creo que es muy importante y es un ejemplo a tomar en otras provincias”, afirmó.
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En relación al gobierno nacional, fue crítico al señalar que, a pesar de los esfuerzos por corregir la macroeconomía, la comunicación con el sector agropecuario sigue siendo deficiente. En ese sentido, expresó que el gobierno tiene un enfoque muy rígido y que “están viniendo con un libreto muy esquemático, con ideas muy fuertes, muy indiscutibles para ellos”. Según el empresario, esto demuestra una falta de comprensión de la realidad del sector agropecuario, que podría llevar a “equivocaciones que nos pueden costar muy caros a todos”.